Estrategias para quienes trabajamos con contratos por prestación de servicios.
En U-Monei, comprendemos las tensiones que enfrentas siendo contratista cuando los pagos se retrasan y sientes estrés financiero. Estamos aquí para apoyarte ofreciendo consejos basados en nuestra experiencia como contratistas.
Aquí te contamos cuatro lecciones fundamentales que hemos aprendido en el mundo del trabajo independiente para ayudarte a manejar mejor tus gastos y optimizar tu flujo de efectivo.
Lección 1. Facturación y recaudo inteligente
La eficiencia en la gestión de facturación y pagos es crucial para mantener un flujo de efectivo saludable. Explora tácticas para optimizar la facturación y minimizar los retrasos en los pagos.
En la medida de lo posible cuando inicies un contrato: Establece políticas de pago claras: Define con claridad los términos de pago en tus contratos, incluyendo fechas de vencimiento y posibles penalizaciones por pagos tardíos o negocia Pagos Anticipados o Parciales. Comunica estas políticas de manera transparente desde el inicio para prevenir malentendidos o disputas futuras. Ofrece múltiples opciones de pago: Facilita el pago para tus clientes con diversas opciones como transferencias bancarias, tarjetas de crédito o plataformas en línea, ofrecer flexibilidad aumenta la probabilidad de pagos puntuales y sin contratiempos.
Potencia tu Marca Personalizando tus Facturas: Incluye todos los detalles relevantes como servicios prestados, tarifas y términos de pago acordados, agrega el logo de tu empresa y otros elementos profesionales para proyectar una imagen sólida y confiable ante tus clientes.
Controla activamente tus cuentas por cobrar: agendate fechas específicas de seguimiento a tus cuentas por cobrar y comunícate con los clientes que no hayan pagado a tiempo.
Lección 2. Domina tus Gastos y Presupuesto
Comprometerte a administrar mejor tus recursos sólo puedes hacerlo si conoces específicamente el valor de tus ingresos y gastos, especialmente en momentos de restricción financiera, aquí tienes lo que he hecho para lograrlo:
- Registra TODOS tus ingresos y gastos mensuales: divide estos últimos en categorías como alimentación, vivienda, transporte, educación, entretenimiento, etc. esta categorización te permitirá identificar áreas donde puedas ajustar tu presupuesto. No olvides registrar los gastos hormiga.
- Recorta Gastos Innecesarios: Revisa tus gastos con atención para identificar aquellos que no son esenciales. Pregúntate: ¿cuánto en horas de trabajo cuesta lo que voy a comprar?
- Automatiza tus finanzas: configura desde tu banco el pago de facturas recurrentes como servicios públicos, administración, etc, así evitas demoras en los pagos y minimizar costos por mora o reconexiones.
Lección 3. Analiza Condiciones de Pagos recurrentes:
- Ajusta fechas de Vencimiento Adaptables: contacta a acreedores y a proveedores para ajustar las fechas de vencimiento según tus fechas de recepción de ingresos, para una gestión de pagos más efectiva y oportuna.
- Optimiza tus Relaciones con Proveedores: Busca negociar con proveedores de servicios o suministros para tu negocio, explorando descuentos por pagos adelantados o planes de precios más accesibles que se adapten a tus necesidades.
Lección 4. Acumular Fondos mediante el Ahorro
Destina una parte de tus ingresos al ahorro para crear un fondo que te permita hacer frente a emergencias inesperadas, por poco o mucho que sea será una diferencia en el momento de cubrir gastos imprevistos como reparaciones de vehículos o facturas médicas, evitando así deudas costosas. Establece esta como tu meta de ahorro principal y, a medida que mejore tu situación financiera, podrás aumentar tus ahorros y con el tiempo convertirlos en capital de inversión.